A los 15 años vi el primer video de Limp Bizkit. Un gringaso con gorrito de vicera tipo camionero caminaba por una calle mientras algunas personas lo perseguían. ¿Ese tipo es famoso? ¿Porque alguien querría perseguir a ese gringo desteñido? Luego llegaba a un escenario con un guitarrista de pupilas dilatadas y aspecto frankrenstiano, donde más gringos desteñidos con pinta de ir a un colegio a realizar alguna matanza lo recibían con gritos poniendo sus mejores caras de neo-nazis.

Al principio la música me pareció una reverenda basura, una gringada más, pero había un gustito extraño que me había dejado la canción. Era pegajosa en cierta forma. No de la forma en que se te pega una canción de Britney Spears, Cristina Aguilera o N'sync (contemporáneos a la época en que salió Limp Bizkit, o al menos, la época en que tuvimos nuestro primer memorable encuentro).

De hecho, "Nookie" es una canción hecha para pegar. Tiene todos los elementos que la hacen una canción que te va a gustar, la vas a escuchar por meses en la radio, tus amigos van ha hablar de esa banda, tus amigos van a comprarse el disco, van a saltar como imbéciles en tu cuarto hasta que tu papá venga a tocarte la puerta pensando que estás realizando algún ritual satánico, pero que luego de esos meses, la vas a olvidar, tus amigos van a dejar de hablar de esa banda para hablar de otra muy parecida, y ese disco (porque en esa época todavía la gente compraba CDs) va a parar a una ruma considerable de discos al lado de tu radio.

Limp Bizkit no era un grupo de musicos talentosos que siguió reinventándose con los años. No le pasó lo mismo que a Linkin Park, que también me gustaba por esa época, y que ha sabido sobrevivir al nu metal con gracia y posicionarse como una de las mejores bandas actuales sin venderse completamente o renunciar a su estilo original del todo (aunque si los comparamos a sus inicios, han cambiado mucho, pero luego, quien no cambia se muere), y encima de eso, hacer conciertos de la puta madre. A lo que voy es que eso no le pasó a Limp Bizkit. Tuvieron su GRAN éxito a principios del 2000 y luego se quedaron atrás.

Pero entonces, ¿porque iría a un concierto de Limp Bizkit? Pues para empezar, la música es DIVERTIDA. ¿A quién no le provoca saltar, gritar, lanzar patadas y sudar con esta música? Para eso está hecha. Esta es la música que los gringos bailan, si podemos llamar bailar a dar saltos y cabezasos por todos lados. Esta música te incita a armar un juergón, a tomar tequila del pico de la botella y golpear a alguien en la cara. Es efectiva para levantarte de tu silla e imposible no comenzar a moverte (y yo creo que lo haría mejor que esas gringas locas que salen en los videos).

Con una canción de Limp Bizkit me pasan dos cosas:  Primero, algo de vergüenza. Es que no hay una cosa mas gringa que esto, no hay una letra mas mugrosa que "We don't, don't give a fuck, and we wont ever give a fuck un, til you, you give a fuck about me and my generation". ¿Que mierda es esto? Es una letra que apela a esos adolescentes gringos retardados que pululan las escuelas públicas, sin sensibilidad de nada, que ven en Fred Durst su ídolo inmediato, que no tiene mas consistencia que cualquier de los "símbolos" adolescentes de ahora, Paris Hilton o Lindsay Lohan. Y segundo, que a pesar de todo eso, la música inevitablemente me crea un efecto de querer perder el control saltando y gritando que no puedo evitar.

Por eso, hoy me puse a recordar a Limp Bizkit. Hace tiempo que no los escuchaba. Lo hice una vez y luego aparté el disco. En serio, no vale más que para un quickie.

Ah, creo que debí poner el video de Nookie, ¿no?

Y bueno, ya.. ¿porque no poner este también? La letra describe con mucho detalle como me siento cuando me viene la regla. En serio.